domingo, 7 de febrero de 2021

Errores històricos.

Quienes creen que los pueblos no se equivocan cuando eligen deben analizar la actual crisis en Venezuela y otras naciones del mundo. Lo cierto es que la seguridad no existe y nadie tiene la verdad en sus manos. Y el error no se despeja con un dogma. Estudiar còmo los errores han creado nuestro presente es definitivo. Rousseau estaba equivocado, el hombre no es bueno por naturaleza por cuanto si la sociedad es mala es porque el hombre así la hace gracias a sus errores.

Y los errores se heredan.

San Agustín fue mucho más lúcido al formular la tesis del pecado original que se convirtió en dogma para quienes profesan su mismo credo. Pero ya es hora de despertarnos del sueño: Los pueblos se equivocan, las personas también. La historia humana está entretejida entre muchos errores. Y estos errores son de tres tipos:

1)      Errores mentales: Tienen que ver con ideas equivocadas.

2)      Errores sentimentales: Se gestan por causa de emociones nefastas.

3)      Errores prácticos: Que brotan de conductas y expresiones verbales inadecuadas.


Lo normal es que los errores históricos aglutinen estos tres tipos de equivocaciones.     

Los errores históricos pueden catalogarse en función de quienes los realicen, por tanto pueden ser personales o grupales. Si son grupales pueden subdividirse en muchas categorías: familiares, comunitarios, locales, regionales, nacionales, internacionales, globales, interplanetarios y universales.

Los errores históricos pueden considerarse también desde un punto de vista antropológico. Cuatro son las dimensiones que definen el ser del hombre en este universo: Su relación con Dios, su relación con los demás, su relación con el mundo en general, y su relación consigo mismo. Por ello podríamos decir que hay cuatro tipos de errores desde esta perspectiva:

1)      Los errores en mi relación con lo divino.

2)      Los errores en mi relación con los otros.

3)      Los errores en mi relación con el mundo sin el cual no puedo existir.

4)      Los errores que cometo conmigo mismo.


En los errores históricos suele estar presente el marco de errores que podemos llamar antropológicos.

Los errores históricos además pueden catalogarse desde las dimensiones de la vida comunitaria humana. Así tendríamos los errores: económicos, políticos, sociales, culturales, religiosos, científicos, técnicos, etc. Debemos aprender que cualquier dimensión de la vida comunitaria humana es susceptible de padecer un error por cuanto sin ellas no se teje la historia.

Aquí les presento una serie de errores históricos:

1)    1) España, la madre patria: En Venezuela, decir que España es nuestra madre patria es un error por cuanto así lo fue para aquellos venezolanos de origen ibérico en la época colonial, pero actualmente no. Somos una innegable mezcla de razas que forman una identidad única pero quienes nacimos aquí somos hijos de Venezuela, no de alguna otra nación.

2)  5 de Julio, Día de la Independencia de la República Bolivariana de Venezuela.

Esto es totalmente incorrecto.

La independencia de Venezuela fue el proceso jurídico-político desarrollado entre 1.810 y 1.830 a fin de romper los lazos que existían entre la Capitanía General de Venezuela y el Imperio español. También implicó el reemplazo de la monarquía absoluta por la república como forma de gobierno en Venezuela.

La independencia de Venezuela produjo el conflicto armado conocido como Guerra de Independencia de Venezuela entre los ejércitos independentista y el español, enviado desde el otro lado del mundo por cuanto en nuestro país había un reducido número de oficiales y soldados ibéricos.

El 5 de julio de 1.811 se firma el acta de la independencia, ese día es celebrado en Venezuela como día nacional, sin embargo en esa fecha lo que se hizo fue declarar formalmente a través del documento Acta de declaración de la independencia,​ que Venezuela se separaba de España. Pero la independencia venezolana no se logró sino una década después.

3)    3) La batalla de Carabobo selló la independencia de Venezuela.

Ciertamente fue una de las principales acciones militares de la Guerra de Independencia de Venezuela, en el marco de las Guerras de Independencia Hispanoamericanas. Se llevó a cabo en el Campo de Carabobo el 24 de junio de 1.821, por parte del ejército patriota contra el ejército español. Esta batalla fue decisiva en la liberación de Caracas el día 29 de junio, así como del resto del territorio venezolano, pero la expulsión definitiva de las tropas españolas se dio en la posterior batalla naval del Lago de Maracaibo.

Es decir, con la victoria en Carabobo, los patriotas neutralizaron las fuerzas terrestres ibéricas y se hicieron con el control del país pero, sin el control del territorio marítimo, desde España hubiesen llegado refuerzos, armas, municiones y demás pertrechos para la reanudación de las hostilidades en busca de un desembarco en suelo nacional. 

El combate naval del lago de Maracaibo ocurre el 24 de julio de 1.823 entre la escuadra de la República de Colombia liderada por el almirante neogranadino José Prudencio Padilla, y la escuadra de la Armada del Reino de España dirigida por el capitán de navío Ángel Laborde y Navarro.

El combate se libró en las aguas del lago de Maracaibo, al oeste de la actual Venezuela, siendo una victoria decisiva para las fuerzas republicanas, con la captura o destrucción de la casi totalidad de la escuadra española, cuya derrota fue seguida por la capitulación y entrega de la ciudad de Maracaibo, ocupada por los realistas en septiembre de 1.822 tras la batalla de Salina Rica. A consecuencia de esta victoria se consolidó definitivamente la independencia de las antiguas colonias españolas de la Nueva Granada y Venezuela, agrupadas bajo la denominación de República de Colombia, quedando como último reducto realista en los territorios independizados la plaza de Puerto Cabello, enclave que no revistió mayor esfuerzo dominar.

En Colombia y Venezuela, la batalla se conmemora cada 24 de julio como el Día de la Armada Nacional de Colombia y de la Armada Bolivariana.

 4)      Las fuerzas patriotas combatieron contra el ejército realista.

El llamado Ejército Realista no era el ejército colonial del Imperio español; ni tuvo la misma misión ni la organización que tenía el ejército colonial durante dicha época, que iba dirigida a la defensa frente a potencias enemigas del exterior. Sin embargo el ejército colonial tenía un fuerte carácter doméstico, americano, formado por tropas locales de la ciudad en un 80 %, y por oficiales afincados en el país, comprometidos con la élite del lugar.

El ejército borbónico o Real, por eso el epíteto Realista, desapareció en España en el año 1.808, construyéndose durante la guerra peninsular una fuerza totalmente nueva para enfrentarse a Napoleón en España y servir en ultramar. Al iniciarse la revolución hispanoamericana el ejército colonial español se desintegró y grandes sectores del mismo se integraron a los ejércitos independentistas y dependieron de las juntas de gobierno americanas. Los batallones coloniales se comportaron en función del apoyo de las élites locales a favor de una Junta o del Virrey.​

El ejército realista en América fue una organización improvisada, surgida de la reacción de los defensores de la monarquía española, que sólo reconocían la autoridad del rey español a través de los virreyes y las autoridades instaladas en España, y tuvo como fin intentar detener el proceso de independencia de las colonias americanas. La mayor parte de las agrupaciones militares españolas fueron de nueva creación y se formaron por unidades americanas nuevas en su mayoría, por unidades recicladas del desarticulado ejército colonial americano que permanecían leales y por unidades expedicionarias formadas en España ad hoc, que a su vez mantendrán su continuidad únicamente por reemplazos de americanos.

 5)      El idioma oficial en Estados Unidos es el inglés.

Falso.

Aunque el inglés es el idioma más hablado en Estados Unidos, este país no tiene lengua oficial. Ni la Constitución ni otras leyes federales establecen algo al respecto, por lo que cada estado lo regula por su cuenta. Más de 30 de los 50 estados han oficializado el inglés, muchos para hacerlo cooficial con otras lenguas. En Hawái, por ejemplo, las lenguas oficiales son el inglés y el hawaiano. En otros, como Dakota del Sur, lo son el inglés y lenguas nativas como las de los Sioux.

La razón para que Estados Unidos no tenga lengua oficial está en el origen del país. Los padres fundadores creían en los derechos y libertades individuales, y consideraban que el Estado no debía imponer una lengua a sus ciudadanos, sino que cada uno era libre de elegir la suya. No obstante, el inglés se convirtió en la lengua oficiosa, por ser la más hablada en las 13 colonias de las que surgió Estados Unidos. 

El debate sobre establecer una lengua oficial reaparece cada cierto tiempo. Movimientos como el English-only (Solo inglés) no ven razones para no declarar oficial esta lengua, ya que es la más extendida del país. Otros se oponen defendiendo que la oficialidad no respetaría los derechos individuales y atacaría a la diversidad demográfica de Estados Unidos. Hasta ahora ninguna propuesta legislativa para convertir al inglés en lengua oficial ha tenido el apoyo suficiente.

 6)      El idioma oficial en Venezuela es el Castellano.

La creencia errónea en Venezuela del Castellano como idioma oficial obedece a razones históricas: al ser los españoles los primeros en arribar a lo que hoy en día es el territorio venezolano, en agosto de 1.498, con intenciones de sumar estas tierras al por entonces Reino de Castilla, tan pronto alcanzaron su objetivo impusieron a los nativos su lengua, que era la castellana.

Fue así como ese idioma pasó a ser patrio. Lo mismo sucedió entre los portugueses y quienes vivían en el actual territorio de Brasil o entre los franceses y quienes habitaban lo que hoy en día es el territorio de Canadá, entre otros casos. Desde que tenemos Constitución se le ha calificado como lengua oficial a pesar que las generaciones que surgieron luego de la época colonial comenzaron a formar su propio dialecto, el Español de América.

La variedad utilizada en Venezuela es el español, el cual se divide en varios dialectos: español llanero, español caroreño, español marabino, español caraqueño, español guaro, español oriental, etc. Lo que significa que este cambia a medida que exploramos el país.

 7)      Dios es un viejo canoso papeado.

De acuerdo con la Biblia, Dios es espíritu (Juan 4:24), y por ello su apariencia no se parece a nada que podamos describir. De manera tal que su apariencia es totalmente inimaginable y demasiado gloriosa para ser percibida sin peligro por el hombre pecador.

En varias ocasiones, la Biblia describe la apariencia de Dios semejante a la de un hombre. Estos casos no deben ser entendidos como descripciones exactas de la apariencia de Dios, sino más bien, la manera en que Dios se revela a sí mismo a nosotros, a fin de que podamos entenderlo. Dos pasajes que describen poderosamente la asombrosa apariencia de Dios están en Ezequiel 1:26-28 y Apocalipsis 1:14-16.

Ezequiel 1:26-28 declara: “Y sobre la expansión que había sobre sus cabezas se veía la figura de un trono que parecía de piedra de zafiro; y sobre la figura del trono había una semejanza que parecía de hombre sentado sobre él. Y vi apariencia como de bronce refulgente, como apariencia de fuego dentro de ella en derredor, desde el aspecto de sus lomos para arriba; y desde sus lomos para abajo, vi que parecía como fuego, y que tenía resplandor alrededor. Como parece el arco iris que está en las nubes el día que llueve, así era el parecer del resplandor alrededor.”

Apocalipsis 1:14-16 proclama: “Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego; y sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno; y su voz como estruendo de muchas aguas. Tenía en su diestra siete estrellas; de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.”

Estos pasajes representan los mejores esfuerzos de Ezequiel y de Juan por describir la apariencia de Dios. Ellos tuvieron que usar lenguaje simbólico para describir aquello para lo que no existen palabras en el lenguaje humano; por ejemplo: “una semejanza,” “que parecía,” “apariencia como,” “su rostro era como,” etc.

 8)      El sol es el centro del universo.

En los años 1.500, el astrónomo polaco Nicolás Copérnico tuvo una idea equivocada para explicar el movimiento de los puntos de luz que ahora sabemos son los planetas. Pensó que el Sol en realidad era el centro del Universo, con la Tierra y los demás planetas haciendo círculos alrededor del astro rey. Sin embargo, la esfera de estrellas que rodeaba el Sistema Solar continuó como parte de su idea.

Ahora sabemos que no sólo no estamos en el centro del Universo, sino también que en realidad no hay un centro del Universo.

La Gran Explosión es el nombre que los científicos dieron a los eventos que iniciaron el Universo. Esta Gran Explosión se describe como una explosión enorme, pero el problema con esta idea es que una explosión tiene un punto central desde donde se inicia, tal como sucede en el caso de una bomba o una chispa que enciende los humos de gasolina. La Gran Explosión en realidad no se asemejaba a esto, pero una explosión es lo más cercano a nuestra experiencia cotidiana como para ayudarnos a comprenderla.

La Gran Explosión no puede haber ocurrido en un lugar en particular del Universo, porque antes de la Gran Explosión no existía un Universo. La Gran Explosión ocurrió en todas partes al mismo tiempo, hace unos 14 mil millones de años, produciendo el espacio y el tiempo, impulsando una expansión muy rápida del espacio, y el espacio ha estado expandiéndose constantemente a partir de entonces.

 9)      Cristóbal Colón descubrió América.

En su primer viaje (1.492-1.493), Colón llegó a varias islas del Caribe: Guanahaní (a la que bautizaron San Salvador), Cuba (Juana) y Santo Domingo (La Española). En La Española chocó su mejor barco, la Santa María, y con su madera se construyó un fortín llamado La Navidad. Colón regresó a España en la carabela La Niña.

El segundo viaje, el 24 de septiembre de 1.493, fue una expedición cuya finalidad era asentar la presencia española en los territorios descubiertos y encontrar el camino hacia India y Catay. La primera isla a que arribó fue La Deseada, el 3 de noviembre; después descubrió Puerto Rico, a la cual bautizò San Juan Bautista, y fue a La Española, donde encontró destruido el Fuerte de La Navidad por una ofensiva del cacique Caribe Caonabo. En la misma isla fundó la Villa Isabela, el 6 de enero de 1.494. Colón descubrió las Pequeñas Antillas (Dominica y Guadalupe), después exploró Cuba y navegando al sur descubrió Jamaica (Santiago).

En el tercer viaje llegó a la isla Trinidad a finales del mes de julio de 1.498. Del 4 al 12 de agosto visitó el golfo de Paria, en la desembocadura del río Orinoco. Denominó a esta región Tierra de Gracia, por la amabilidad de los indígenas. Supuso que había llegado a un continente por la gran cantidad de agua dulce. Así, por primera vez, se llegaba a Tierra Firme.

Descubrió la isla Trinidad y la desembocadura del río Orinoco en Tierra de Gracia (Venezuela).

Posteriormente, recorrió y exploró las tres islas del actual estado de Nueva Esparta, la isla principal la llamó Asunción, las otras son las actuales Cubagua y Coche.

Finalmente arribó a La Española, donde los españoles se habían sublevado por la falta de riquezas que supuestamente encontrarían. En una de las negociaciones, Colón propuso a un grupo de españoles el regreso a Cubagua para el tráfico de perlas. Se fundó un asentamiento perlífero y más tarde, en 1.528, de allí nace la primera ciudad fundada por españoles en continente americano, Nueva Cádiz.​

En su cuarto viaje (1502-1504) Colón exploró las costas de América Central (Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá).

Por los problemas surgidos en La Española, Nicolás de Ovando, nuevo gobernador de la colonia, no permitió que Colón desembarcase a pesar de una inminente tempestad y que cambiase uno de sus buques por otro de mejores condiciones. Colón capeó como pudo el temporal y pasó a Jamaica, aunque la tormenta no le dejó hasta el 12 de septiembre, luego de 88 días de tormenta.​

Siguiendo al oeste, descubriendo la isla de Guanaja, en la costa de Honduras, en América Central, encontró una embarcación con mercaderes mayas que le ofrecieron cacao. En la Punta Cajina (hoy Punta Trujillo) los tripulantes descendieron de sus naves para asistir a la primera misa católica celebrada en la tierra firme de América el 14 de agosto.​ Continuó al este y lo sorprendió un huracán, durante varias semanas las 4 naves fueron sacudidas por la tormenta y el 12 de septiembre doblaron un cabo. Allí se calmó la tormenta y Colón lo bautizó como Cabo Gracias a Dios, en la costa de Honduras, por decir «Gracias a Dios que al fin salimos de esas honduras» y de allí navegó hacia el sur.​

Pero de allí a la afirmación que es el descubridor de todo un continente, es una temeridad.

 10)  Lucifer, el Diablo y Satanás son tres figuras distintas.

En el Antiguo Testamento al adversario de Dios se le llama Satán, que significa literalmente enemigo u opositor. Paradójicamente, el Satán reflejado en los estratos más antiguos de la Biblia nada tiene que ver con ángeles caídos ni con demonios corrientes ni con el origen del mal, simplemente es un ángel a las órdenes de Yahvé encargado de ciertas tareas desagradables. Es más adelante cuando Satán ocupa en la narración el puesto del antipoder frente al Dios Creador, aunque la existencia de este antipoder se intuye en el Génesis.

En el Nuevo Testamento, a Satanás se le nombra como Diablo, del verbo griego diaballo (acusar). Otros apelativos que recibe son Legión, Príncipe de los demonios, Beelzebub, Mentiroso, Padre de la mentira, Pecador desde el principio, Tentador, Maligno, Espíritus malignos, Espíritus inmundos o impuros, Homicida desde el principio, Señor de la muerte, Dragón, Serpiente antigua, Belial, Dios de este mundo, Poder de las tinieblas, Seductor del mundo entero, Ángel de Satanás o Acusador.

Lucifer, por su parte, no está mencionado en el Antiguo Testamento, no al menos directamente, significando Estrella de la mañana o El que lleva la luz. Según los textos del renombrado exorcista P. Gabriele Amorth, Lucifer sería el nombre propio del segundo demonio en importancia en la jerarquía demoníaca. No obstante, para el Cristianismo Satanás y Lucifer son la misma cosa.

 11)  El nombre de Dios es Jehovah.

Esto no es cierto por cuanto la vocalización del nombre del Dios judío YHWH se perdió principalmente por dos hechos: 1) la antigua escritura hebrea no contenía vocales y, 2) la pronunciación del nombre de su dios era prohibida como símbolo de respeto.

La palabra Jehováh nace de la unión del nombre YHWH (sin vocales) con las vocales de la palabra Adonay que significa Mi Señor. Adonay fue ampliamente usado y fue reemplazando el nombre de Dios para que éste no fuese pronunciado. Fue tan popularizado que, al traducirse la biblia al Castellano, algún español escribió Jehovàh por YHWH, y así se ha mantenido por los siglos de los siglos aun cuando los estudiosos y los israelitas afirman que la pronunciación correcta es Yahvèh.

 

Gracias por leerme sin considerar esto un ERROR.

 

 

Lic./Psic. J. A. Gómez Giménez.